2 sept 2014

De Pepino Fernández a Félix Díaz: Honor y gloria

Recién vuelvo de un evento interesante en el Senado, en donde con varios amigxs abogamos por la reglamentación del derecho a la consulta previa de los pueblos indígenas. La reunión fue muy satisfactoria por lo escuchado, pero sobre todo, como suele ocurrir, por la presencia y la palabra de Félix Díaz, líder Qom.

Con Félix me ocurre algo similar a lo que me ocurre con Pepino Fernández, el pionero piquetero salteño, que se movilizó cuando nadie lo hacía, sufriendo decenas de procesamientos y persecuciones por ello -como Félix Díaz. Ambos, por las virtudes que lucen, movilizan gente, y por ello han sido perseguidos siempre, por la policía, por la justicia, por los gobiernos previos, por este gobierno: al poder político le interesan los negocios, y lo que esta gente reclama no sirve para que la gente en el poder se vuelva más rica -le pone trabas.

Ambos me parecen personajes que pasaron ya a la mejor historia del país, personas que cuando hablan se detiene el mundo, próceres que representan lo más decente de un país desde arriba arruinado: actores que ponen el cuerpo desde la miseria, con inusual dignidad, con absoluta modestia, con convicciones que atraviesan muertes, extorsiones, persecusiones desde el poder. Personas que saben lo que dicen, que piensan lo que hablan, que sienten lo que piensan. A ambos, honor y gloria, que todo lo demás se lo han quitado.

p.d.: Félix denunció hoy la mentira permanente del gobierno nacional (recuerdo las personas que dedicaron horas, desde la televisión pública, a difamar su nombre y minimizar su rol: no los olvidaremos); denunció la opresión a que lo somete el gobierno provincial; denunció al gobierno nacional por avalar la campaña de exterminio a la que están sujetos; denunció la persecución y muerte a la que se ve sometida su comunidad, su familia, todavía hoy, mientras el gobierno propagandiza éxitos con aborígenes sonrientes vestidos con plumas.


3 comentarios:

verot dijo...

totalmente de acuerdo, conocer a Félix es una forma concreta de poner a prueba las propias convicciones. su lucha me parece enorme.

rg dijo...

totalmente, un gran test de época, para ver quién estuvo parado en qué vereda

Anónimo dijo...

por favor, ese indigena trucho!!! de vos ya nada me sorprende, sos un salame